Fragmentos de libros. EL COLOR PROHIBIDO de Yukio Mishima   Final I

TEXTO DE PORTADA:  Aunque leemos que el término Shinji -el título original de esta obra- es una ambiguedad en la lengua nipona para el color y el erotismo, no encontramos ni una sola escena erótica en la novela. Y sin embargo, tras la misoginia explícita de esta creación de juventud de Mishima (por capítulos, soporífera), a nosotros nos parece que subyace una fobia distinta, algo así como un desprecio a las formas de vida muelle y sin riesgo, a las formas demasiado precedibles e inerciales, diseñadas como para un mundo vegetal-: La homosexualidad como una distinción de la supremacía del espíritu sobre la materia.
Hoy también, setenta años después, los colores vibrantes que pueden o necesitan brillar sobre el tapete gris y monocorde, de pensamientos comunes y lineales...
son solo relámpagos en la nocturna,
narcótica y artera,
y falsamente múltiple
prisión global que los vela,
cuando no, los corrompe o los proscribe,
cuando no, los prohibe o los castiga.

Resplandor añil sobre marmol. Fotografía hecha con los piés. Lugar de captura irrelevante   © LCJ     

Editorial:   www.alianzaeditorial 

  

Finales de libros (transcripción de los dos últimos capítulos)

 

 

          32    Shunsuké Hinoki visto por sí mismo

 

Hay escritores para quienes el hastío tan sólo consiste en alardear de hastío, con lo que podríamos llamar el don del hastío o el hastío del don. Shunsuké Hinoki no pertenecía a esa clase. La vanidad le había salvado de semejante trampa. Dicho esto, dado que alardear de hastío no deja de ser una vanidad paradójica, lo que nos salva es una especie de superficialidad auténtica que cuida de no caer en la paradoja. Shunsuké debía, en parte, su equilibrio al cultivo de esa clase de superficialidad....

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